Saludo grave de sinuosidad etérea,
discurriendo turbulento
hacia el tropiezo de un "lo siento"
Nos: ¿nos conocemos de algo?
Vos: disculpe, creo que se equivoca
Bruma por sorpresa
trotando anginosa,
aplastando sin permiso
el baluarte de un suspiro
Inspirar,
expirar,
y evocar
desde el doble-pensar,
la cizalla de un "te quise",
rotando especularmente,
hasta el abrazo de la tangente
que nos quiso eternos
Nos (dicho para sí): ¿silbas tus tropiezos? ... Pues yo tampoco
(Fundido estroboscópico y
picado cenital de marco monodimensional en tiempos y derivas..., hasta un olvido
en negro)